COVIDaren eskutik gaixotasuna, sufrimendua eta heriotza gertutik sentitu ditugu. Zainketa aringarrien esperientziatik pertsonaren zaintzan alderdi espiritualak duen garrantzia aldarrikatu nahi da. Izan ere, espiritualtasuna bizitza integratzen, lotzen, transzenditzen eta hari zentzua ematen lagun dezakeen giza-grina izanik, sufrimenduari aurre egiten lagun diezaioke.
Horretarako, minak, sufrimenduak eta heriotzak utzitako kaosetik abiatuta, beldurra, tristura eta haserrea onartuz sakon sakonean kolpatu gaituen errealitatea onartuko dugu, eta dena ezin dugula kontrolatu jabetuko gara.
“Tuvimos la experiencia,
pero perdimos el sentido.”
(T.S. Elliot)
Ya ha terminado abril y las declaraciones oficiales nos hacen vislumbrar que aún nos queda mucho por vivir hasta que recuperemos eso que llamábamos“normalidad”.
A todos nos ha cambiado la vida. Sin embargo, para muchas personas (hoy, 2 de mayo, ya hay identificados 216.582 casos en toda España y han fallecido 25.100 personas por las cuales podemos estimar unas 100.000 en duelo) este tiempo ha supuesto un impacto especialmente importante en sus vidas. Se han visto abocados a experimentar la enfermedad, el sufrimiento, la muerte y el duelo por sus seres queridos. Y todo ello en unas condiciones que podríamos decir que traumáticas. Por otro lado, hay otras personas, para las que no hay aún cifras, que han sido victimas colaterales de la pandemia: las personas con enfermedades avanzadas. Todo esto, seguro, supondrá otro tipo de oleada del COVID que nos colocará en atender las secuelas de la pandemia.
Quienes trabajamos en el ámbito sanitario tampoco hemos quedado al margen de esta experiencia. La hemos vivido de un modo que podríamos decir “total”. Pues la hemos afrontado en proximidad a todas esas personas contagiadas, en nosotros mismos, en nuestras familias y en nuestros compañeros. Además, la hemos vivido experimentando en muchos momentos las limitaciones personales y estructurales para poder desarrollar nuestra labor. Hemos vivido en muchas situaciones las limitaciones que la realidad imponía enfrentadas con nuestras más arraigadas convicciones sobre el modo humano de cuidar a las personas enfermas y dolientes. Como antes decía pensando en la población general, también las personas que trabajamos en el ámbito sanitario vamos a necesitar apoyo para gestionar las secuelas de la pandemia en nosotros mismos.
En cuidados paliativos hemos afirmado la importancia de la dimensión espiritual en el cuidado de las personas. ¿Cómo nos puede ayudar en este momento esta mirada espiritual? ¿Puede el abordaje de lo espiritual en todos los que hemos vivido esta experiencia contribuir a que no perdamos el sentido?
En una de las primeras Guías de Acompañamiento Espiritual que desarrolló el Grupo de espiritualidad de SECPAL se decía que “por espiritualidad entendemos la aspiración profunda e íntima del ser humano a una visión de la vida y la realidad que integre, conecte, trascienda y de sentido a la existencia.”
Este itinerario espiritual que permite el afrontamiento del sufrimiento ha sido descrito por diferentes autores y en todos ellos descubrimos unas características:
Se trata de un proceso de evolución y cambio caracterizado por el crecimiento personal a través de fases de sufrimiento y distrés.
Se llega a un momento de agotamiento y renuncia a mantener el control. Es el momento de la aceptación de la realidad, del abandono y de la entrega.
Y al final se alcanza la comprensión de la experiencia y la construcción de una nueva identidad.
De modo esquemático el itinerario discurre desde el “caos” a la “aceptación” y de ahí a la“transcendencia”.
Este itinerario que parte de esa aspiración humana de dar un significado y sentido a la existencia y que el sufrimiento, el dolor, la muerte han trastocado y nos deja en ese “caos” que se refleja en las preguntas del por qué y para qué y que tantos dolientes en diferentes momentos de nuestro vivir nos hemos hecho y nos haremos.
La experiencia del COVID sin duda nos ha sumido a todos en una forma de ese “caos” y en medio de él hemos luchado por no sucumbir al sufrimiento de las personas y al nuestro. Este nos pone ante el primer paso del camino. Recocer la realidad que estamos viviendo, reconocer nuestro propio dolor y las heridas que nos hemos hecho. Permitirnos sentir. Reconocer estas emociones como propias. El miedo. La tristeza. El enfado.
En el caso de los profesionales es incluso más importante poder hacer este reconocimiento: “soy un profesional y también tengo emociones”.
Para poder hacer esto necesitamos un lugar seguro en donde todo esto pueda aflorar sin que se nos juzgue por ello. Este lugar seguro tal vez lo podamos encontrar en un amigo, en un profesional. En cualquier caso reconocer el caos es el punto de partida. Y adentrarse en él, es el camino para sanar. Y poder llegar a “aceptar” la realidad.
Esta es hoy mi (nuestra) realidad. Nos toca vivirla. Y aunque a veces parece que lo inunda todo y que no hay nada más, somos mucho más que esta realidad. Nuestra vida es mucho más que lo que hoy estamos experimentando.
Es hora de reconocer cómo esta realidad impacta o ha impactado en nuestra conciencia, en nuestro proyecto vital y también reconocer el conjunto de realidades que dan contexto a nuestra vida: nuestra familia y nuestros seres queridos, lo que es importante para nosotros, aquello a lo que damos valor y ha dado y da sentido a nuestra vida.
Es el momento de mirar no sólo la amenaza que vivimos sino también los recursos que tenemos para afrontarla.
Aquí tienen sentido preguntas por nuestra identidad. ¿Quién soy? Y ¿Quién quiero ser? Y desde dónde la definimos. Desde mi o desde lo que otros esperan de mí. Desde lo que hago o desde lo que soy.
Si seguimos por este camino nos iremos acercando a poder“aceptar”esta realidad. A ir dejando el “caos” para abrirnos a un nuevo momento.
La “aceptación” que proviene de ese camino de adaptación. Donde acepto que no puedo controlarlo todo. Donde acepto que la vida no la domino. Y que muchas de las cosas que me ha tocado vivir quedaban fuera de mi control. Que si de mi hubiese dependido lo hubiera hecho distinto. Que la vida de los que son importantes para mi, aquellos a quienes amo, no depende de mi.
Esta aceptación nos coloca ante el reto dela esperanza. Y también nos confronta con su reverso, cuando nos hacemos conscientes de que lo que se fue no volverá. Sin embargo es oportuno preguntarnos ¿Qué es lo opuesto a la esperanza?.
De un lado tenemos la idea de “desesperación” que nos quita la energía y la vitalidad y nos sumerge en un estado de apatía. Por otro la “desesperanza” que también se opone a la apatía y que aunque estamos convencidos de que aquello que esperamos no se podrá alcanzar, seguimos en posesión de la energía y vitalidad para mirar al futuro, buscar soluciones o nuevos objetivos con los que conectarnos.
Y es que mientras hay esperanza hay espacio para un futuro diferente del esperado inicialmente. Mientras hay esperanza hay vida.
Podría parecer que llegados a este punto de la aceptación ya hemos acabado nuestro viaje sin embargo aun nos queda el camino para construir ese futuro diferente al esperado. A este itinerario le llamamos “transcendencia”.
Sin embargo. ¿Qué es la transcedencia? O de un modo más operativo ¿qué es transcender? Voy a recurrir a Víctor Frankl para aproximarme a esta definición.
“Cuando nos enfrentamos a un destino que no podemos cambiar, estamos llamados a dar lo mejor de nosotros mismos, elevándonos por encima de nosotros mismos y creciendo más allá de nosotros mismos; es decir a través de la transformación de nosotros mismos.”
Es posible que desde nuestro momento actual más cercano todavía al caos que a la aceptación oír hablar de transcendencia nos quede muy lejos y puede que creamos que no podemos llegar y sin embargo muchos hemos sido testigos de experiencias similares en las personas que hemos acompañado y que como tantas veces hemos afirmado han sido nuestros maestros. Hemos visto reconciliaciones imposibles. Hemos visto morir en paz tras vidas de una gran lucha. Hemos visto expresiones de amor en medio del sufrimiento.
En medio de estas experiencias el caos vivido ha encontrado sentido y ha sido transcendido.
La pandemia ha evolucionado. Se habla de fases de desescalada. De “nueva normalidad”. Pero corremos el riesgo del que nos alertaba T. S. Elliot. “Tuvimos la experiencia, pero perdimos el sentido.” Nuestras ganas de dejar atrás lo vivido pueden encontrar una salida en falso de este viaje que iniciamos. Y al final perder la oportunidad de aprender, de crecer, de transformarnos y así transformar nuestra sociedad y nuestro mundo.
Y descubrir que lo importante no era hacer sino ser. No era trabajar sino vivir. Que la clave no era la autosuficiencia sino la interdependencia. Que no se trataba de sobrevivir sino de vivir. Que el objetivo no era alargar la vida sino ensancharla. Que lo que nos une a todos los seres humanos es la vulnerabilidad. Y que este reconocimiento hace posible una humanidad compartida. Y el cuidar. Cuidarnos unos a otros, a nosotros mismos y a esta tierra que habitamos. Cuidar es el principal compromiso humano.
Ojalá, que en las lecturas que hagamos de lo vivido, no nos olvidemos de la dimensión espiritual. Sólo así podremos superar algunas de las secuelas que tendremos que atender y prevenir futuras crisis desde su raíz.
Quienes nos dedicamos a los cuidados paliativos hemos sido los que más hemos reivindicado esta dimensión en la atención de las personas. Y ahora estamos llamados a no olvidar este análisis. A no perder la oportunidad que la vida nos ofrece de ahondar en la búsqueda de sentido y poder concluir la estrofa del poema de T. S. Elliot:
“Tuvimos la experiencia, pero perdimos el sentido, y acercarse al sentido, restaura la experiencia “.
Ziurgabetasunaren erdian itxaropena galdu gabe elkarrekin otoitz egiteak elkarbanatzearen beharra pizten du. Gaixotasunean aldamenean egotea eta laguntasun espirituala ematea oinarrizko zutabeetako bat da ospitaleko bizitzan. Egun hauetan familiek eta gaixoek ospitaletan izan duten bakardadearen erdian hartu-eman adeitsua eta entzute enpatikoa beharrezkoak izan dira laguntasun horren presentzia sentitzeko.
Sufritzen dagoenaren ondoan egoteak mundua beste era batera begiratzen laguntzen dizu. Hurkoaren zaurgarritasunak ekintzara bultzatzen zaitu, eta ospitaleko kaperan esertzeak, Jainkoak eusten duen isiltasunaren erdian, aurrera jarraitzeko indarra ematen dizu.
El eslogan de la Conferencia Episcopal Española para la Campaña Pastoral de la Salud 2020 es el de “acompañar en la soledad”. Las medidas adoptadas para hacer frente al coronavirus, confinamiento y aislamiento, han hecho más urgente que nunca la necesidad de ese acompañamiento. ¿Cómo es el día al día en este acompañamiento hospitalario que realizáis?
El acompañamiento en el hospital ha sido más difícil que en condiciones habituales.
No hemos podido movernos con libertad por el hospital, las personas enfermas no han podido acceder a la capilla, no ha habido prácticamente familiares, y las visitas que hacíamos necesitaban de EPI pero había que tener en cuenta la optimización de los recursos. A pesar de esto, los acompañamientos realizados han sido más intensos. Aspectos como la mayor intimidad ya que era más difícil verse interrumpido, la mayor necesidad de sentirse acompañado en la dureza del momento, el compartir la oración manteniendo la esperanza en la incertidumbre... intensifican la necesidad de compartir. En ocasiones, la soledad, hace que se comparta más, con quien se acerca con tiempo y predisposición.
Por otro lado, hemos visto necesario utilizar todos los recursos a nuestro alcance para presentarnos cercanos. El teléfono y las videollamadas han sido grandes aliados en estos días. Hemos preparado, también, material de oración que hemos hecho llegar a quien nos lo ha solicitado, hemos acompañado y escuchado al personal del hospital y hemos colaborado en un proyecto del hospital para poner en contacto a personas enfermas dependientes y sus familias, a través de videollamadas.
El acompañamiento religioso, para el creyente, y el acompañamiento espiritual, en general, son pilares importantes en la enfermedad, por eso desde el servicio de atención religiosa y espiritual siempre hemos considerado importante estar presente en los hospitales y creo que desde la Iglesia se ha hecho un esfuerzo importante por mantener nuestra presencia
¿Cómo se acompaña el sufrimiento de los familiares y amigos que no pueden estar con los suyos? ¿Qué cicatrices deja no podar hacer el duelo de tu gente? ¿Se está deshumanizando la enfermedad, y la muerte?
Hemos tenido que buscar otras formas de hacernos sentir cercanos. Hemos usado la capilla en lugar de las habitaciones para encontrarnos, hemos usado más la comunicación telefónica, un mensaje que haga sentir que estamos cerca, el trato amable y la escucha empática han tenido que ser intensificados para hacerlo sentir sin vernos.
Yo no soy una experta en duelo, pero creo que este se hará aunque sea a otro ritmo y de otra manera. Aunque, yo creo, que el duelo siempre deja alguna cicatriz, el ser humano tenemos capacidad para curar nuestras heridas y hacer una lectura reparadora de los hechos. Está claro que es más fácil cuando uno puede despedirse junto a su ser querido, cuando se siente que se ha hecho todo lo que se ha podido por él y se ha rezado a su lado. Pero muchas veces, esto no es posible y nos toca aprender a vivirlo valorando otras cosas. El personal hospitalario hemos sido aquellas personas en las que las familias han depositado su confianza para el cuidado de sus seres queridos, si hemos sido capaces de transmitir que hemos estado al lado del enfermo cuidándolo lo mejor posible, sus familias se sentirán más tranquilas.
En este momento, debemos ayudar, a las familias, a valorar el gran esfuerzo que han hecho por su familiar. Acciones como cuidar desde la distancia, estar pendiente del teléfono, escuchar las indicaciones médicas, la oración compartida y hacerse presente mediante otros recursos es lo que estaba en sus manos. Debemos estar atentos/as a estas personas para ofrecerles los recursos que necesiten para superar este duelo y no olvidarnos de ellas.
Esta sociedad nos aleja de lo feo, no estamos preparados para ver sufrir y acompañarlo, hay familias que deciden no ver morir a su familiar. Y familias que sufren durante años la enfermedad en soledad, por que en el día a día, cada uno vive en sus problemas y la sociedad no tiene tiempo para acordarse del que no ve.
Esta crisis sanitaria ha dejado a la vista todas las vergüenzas de la sociedad (informe Foessa, sociedad desvinculada), el distanciamiento social, el confinamiento ha destapado la fractura y desigualdad existente en nuestra sociedad. ¿Vivimos en una sociedad enferma? ¿Fragilidad y vulnerabilidad individual, y colectiva?
Vivimos de cara a nuestra vida, se nos olvida el otro, nos mandan mensajes de tener más, aparentar más,… y nos olvidamos de “ser con”. Las prisas no nos dejan ver lo importante de la vida. Este momento de parar nos ha dado la oportunidad de valorar lo realmente importante en nuestra vida, de qué hemos sido capaces de prescindir estos días y a quienes hemos echado de menos.
Pero hemos seguido sin ver la pobreza, la precariedad, la marginación,... metidos en la burbuja de nuestros hogares privilegiados, desconocemos, muchas de las dificultades que han vivido muchas otras personas. Me gustaría creer que de todo esto va a salir un verdadero deseo de ponerse manos a la obra para construir una sociedad nueva, justa para todas las personas donde nadie quede excluido.
¿Estar cerca de los que sufren hace que se vea la realidad de otra manera, con otros ojos? ¿O es el cambio en la mirada lo que nos permite acercarnos al sufrimiento del otro? En cualquier caso, ¿percibís como don el poder estar cerca del que sufre?
Estar cerca del que sufre te ayuda a mirar el mundo de otra manera, no es posible acompañar en el dolor, en la miseria y volver a tu casa como si nada hubiera pasado. La fragilidad del otro te invita a actuar, a reaccionar y a buscar un bien común.
Por eso, muchas veces, no miramos, no queremos ver lo que está pasando realmente, no queremos sentirnos interpelados. El dejarnos llevar por la rutina y el conformismo nos paraliza ante el cambio y la mejora de la sociedad.
Para mí, es un regalo, estar cerca del que sufre pese a la dificultad. Es una oportunidad para crecer y para valorar lo sencillo de la vida. Es acompañar en un proceso que enriquece tu vida a la vez que ves crecer en sentido la vida del otro. Sin duda, necesitas prepararte, necesitas apoyos como la fe, la presencia de personas queridas, necesitas tiempo y espacio para reconocer en tí ese proceso… pero merece la pena. A mi, esta tarea, me ayuda a sentirme cada día un poco más cerca de Dios.
Parece que, por fortuna, la situación en los hospitales se está calmando. ¿Qué lugar ha ocupado la capilla en todos estos días de tensión, trabajo y excepcionalidad? ¿Qué tipo de personas se acercaban a la capilla? ¿Qué buscaban?
La capilla ha quedado más vacía que nunca pero, a la vez, con encuentros más intensos y calmados.
No ha habido prácticamente familiares en el hospital, los enfermos no podían salir de las habitaciones y el personal sanitario trabajaba sin parar.
Sin embargo, el hospital donde trabajo, ha hecho un esfuerzo importante por que los familiares pudieran dar su último adiós a las personas en proceso de agonía. Así que en la capilla han tenido espacio las personas que veían por última vez a su ser querido, hemos realizado oraciones con familias que no podían estar en la habitación, hemos acompañado al personal que buscaba sosiego en la capilla y ha sido nuestro sustento, sin ninguna duda.
Te acercas buscando el consuelo y la esperanza que solo Dios puede darte, te acercas recordando tiempos donde celebrar y compartir y ahora solo se escucha el silencio, te acercas buscando a alguien con quien compartir lo vivido en estos días. Hemos vivido un Pascua más llena de sentido que nunca, la experiencia del Resucitado cobra en estos momentos un significado especial y sentarse en la capilla en el silencio sostenido por Dios te da la fuerza para continuar.
¿Es posible la gracia de Dios en tiempo de desgracia? ¿Hay razones para la esperanza en tiempos de desesperanza?
Ese tiempo de desgracia ha ayudado a sacar lo mejor de nosotros y nosotras. Hemos aplaudido al personal más visible en esta lucha pero cada persona ha puesto su granito de arena, hay mucho que no hemos visto pero que sin lo cual, las cosas hubieran ido de forma distinta y eso es reflejo de la esperanza que habita en cada uno.
Tras un primer momento de aceptar la situación, de darnos cuenta que esto no era broma hemos resituado nuestra capacidad de actuar y hemos seguido adelante demostrando que la unión hace la fuerza y que todas la personas son importantes, hemos comprobado que tenemos que avanzar todos juntos sin excluir a nadie. ¿no es eso tiempo de gracia? ahora nos toca ir más allá y pensar cuál es la sociedad que queremos y cómo conseguirlo
¿Algún testimonio, situación o experiencia que os haya impactado?
A este hospital acuden normalmente personas con enfermedades crónicas, que les obligan a ingresar periódicamente . Con el paso del tiempo se van haciendo conocidas y cuando las ves por el pasillo es como ver un viejo amigo. Ellas, a veces, dicen medio en broma que esto es su segunda casa. Estos días muchas de ellas, han tenido que ingresar y algunas han fallecido incapaces de superar esta terrible enfermedad. Sus familias nos han llamado para despedirse y agradecer los días compartidos. Desde aquí me gustaría hacerles presentes, aplaudir por ellas, que se han marchado en silencio, sin hacer ruido, camufladas entre los números de personas fallecidas y agradecer todo lo aprendido junto ellas, toda una lección de vida, de superación y esperanza. Junto a la cicatriz que deja en mi corazón su pérdida no puedo dejar de poner sus sonrisas que llenan de sentido mi vida. Gracias por haberme hecho un hueco en vuestras vidas y haberme enseñado tanto de la mía y del valor de Dios en ella.
2020ko Osasun Pastoraltzaren Kanpainarako leloa “bakardadean lagun egin” da. Koronabirusari aurre egiteko neurriek, konfinamenduak eta aislamenduak, berebiziko gaurkotasuna eman dio bakardadean ‘lagun egite’ horri. Nolakoa da ospitaletan egiten duzuen akonpainamendua? Zertan gauzatzen da ‘lagun egite’ hori?
Ahal izan den neurrian presente egoten saiatu gara, eta gure beharra izan denean edo deiren bat egon denean han izan gara. Nabaritu da hala ere eskariak asko murriztu direla egun hauetan. Beldur handia sumatu da giroan eta guztia oso isilean eramana izan da. Kapera irekia egon arren, bisitak asko gutxitu direla nabaritu dugu. Presentzia mantentzea izan da gure lagun-egiteko modua.
Nola izan haien gertukoekin egon ezin duten senitartekoen bide-lagun? Zer nolako zauriak uzten ditu zure gertukoen aldeko dolua ezin egin izanak? Gaixotasuna deshumanizatzen ari gara, eta heriotza?
Hala eskatu zaigunean ondoan egoten saiatu gara, isiltasunean gehienetan. Sufrimendua oso barruan bizi izan dute eta ezin adierazteak areagotu egin du sufrimendu hori, hor ondoan egoten saiatu gara eta horrelakoetan presentzia hutsarekin gehiago esaten denez, isiltasuna izan da nagusi.
Egoera berezi honetan segurtasun neurriak bereziak eta muturrekoak izan dira eta horiek bete nahiak agian bai eraman duela gaixotasuna eta heriotza bera deshumanizatzera, baina egia da baita ere, kasu hauetan izan dela bereziki, azken urteetan egoera horiek aldatze aldera lan handia egiten ari direla iruditzen zaigu eta.
Badirudi osasun-krisi honek gizartearen hutsune guztiak agerian utzi dituela (Foe-ssa txostena, loturarik gabeko gizartea), distantziamendu sozialak, konfinamenduak, gure gizartean dagoen arrakala eta desberdintasunak agerian utzi dituzte. Gizarte gaixo batean bizi gara? Zaurgarritasuna eta hauskortasuna norbanakoaren ezaugarriak dira, agian gizartearenak ere bai?
Jendeari berez sortu zaion elkartasun eta laguntza keinuak gizartean bizi dugun itxurakeria, bakardade eta haustura horren adierazgarri eta salatzaile izan direla iruditzen zaigu. Gizarte honen konbentzionalkeria oso nabarmen islatu eta salatua izan da. Gaixotasun honek gizartearen ahultasuna eta gizarteak itxurari ematen dion gehiegizko garrantzia nabarmen geratu dira, oso ageriko geratu da zein ahulak garen eta guztia ezkutatu nahi izan da.
Bestalde, agerian geratu da jendartearen arrakala sozial eta ekonomikoa, ezberdintasunak areagotuz, eta zenbait oso egoera larriak bizitzera iritsi izan dira. Itxuraren gizartean bizi izan garela oso nabarmen geratu da.
Sufritzen duenaren aldamenean egoteak errealitatea beste modu batera ikusten laguntzen du? Edo eta begirada aldaketak egiten du posible hurkoaren sufrimendura hurbiltzea? Edozein kasutan, Jainkoaren opari modura bizi duzue sufritzen duen horren aldamenean egon ahal izatea?
Beti esan izan dugu ospitaleratzea gertatzen denean bizitza eta denbora geratu egiten direla, gure bizitzak geldiune behartu bat jasaten du eta guztia sufritzen ari den gure senitarteko horren inguruan geratzen da. Aldatu egiten da bizitzarekiko gure begirada, erraz nabarmentzen da zer den garrantzitsua eta zer ez. Horrek bizitza eta mundua beste modu batera begiratzera eta sufritzen ari denarekiko begirada berezia izatera eramaten gaitu.
Beste modu batera begiratzeko aukera eta ahalmen Jainkoaren dohain bezala bizi dugu, berak jarri digu bidea begirada horretara iritsi gaitezen. Eta dohaina zeregin eta erantzukizun den aldetik, sufritzen dutenekiko gertutasuna dohaina da eta zuzengabekeriaren aldeko paper salatzailearen zeregina betetzen du.
Badirudi ospitaletako egoera baretzen ari dela, zorionez. Muturreko tentsio, lan eta ez ohikotasun egun hauetan zein leku izan du kaperak ospitaletan? Zer nolako pertsonak hurbildu dira bertara? Zeren bila?
Kaperak betiko moduan irekia egoten jarraitu du, egia da egun hauetan jendearen joan etorria asko murriztu dela egoeragatik, baina bertako profesionalek eta bestelako gaixoen senitartekoek asko eskertu dute irekia mantendu izana. Jendea lasaitasun eta isiltasun bila hurbiltzen da kaperara, Jainkoaren aurrean beraien kezkak askatzeko toki baten bila, lasai negar egiteko toki baten bila, bakarrik lasai egoteko toki baten bila. Oasi txiki bat bilakatu da askorentzat ospitaleko handitasunaren erdian.
Desgrazia garaietan posible al da Jainkoaren grazia? Etsipenaren erdian itxaropena posible da?
Jainkoaren graziak bizitzaren ezbeharrak eramangarri egiten laguntzen digu eta hori adierazten saiatzen gara, guztia oso ilun ikusten dugunean ere beti dago argi izpi txikiena bada ere itxaropenera eramaten gaituena.
Eskerrak ematearen ekintza bera ere beharrean aurkitu garenean eskatutakoaren ondorio da. Eskerrak emate hutsa egoera hori aintzakotzat hartu izanaren adierazle da. Jainkoarekiko dugun gertutasun eta konfiantza aldarrikatzen da.
Barrua ukitu dizuten esperientzia, egoera edo testigantzarik bai?
Koronabirus gaixo bati gaixoen oliadura eman ondoren senideekin elkarri emandako bostekoa.
Urtea beteko da Joseba Segura Bilboko Elizbarrutiko Gotzain laguntzaile izendatu zutenetik. Gehienek ongi hartu zuten izendapen hura. Etorkizunak esango du bere lana komunitatearentzat onuragarria izan den edo ez. Aldaketarik nabarmenena harremanetan nozitu du, orain parroko garaiko harremanak baino komunikazio-estilo inpertsonalago batean ematen dira. Ez zaio gustatzen, baina karguaren parte dira. Formazioz psikologoa, teologian doktore eta ekonomian masterra egindakoa da, mundua aldatzeak, baliabideak nola inbertitzen eta gestionatzen ditugun pentsatzea ere esan nahi du.
En junio del año pasado Ángel Mari Unzueta escribió en nuestra revista a propósito de tu nombramiento como Obispo auxiliar de Bilbao. El titular era “Otra música”. ¿Cómo ha ido el año, te ha gustado cómo ha sonado?
No sé si se trata tanto de cómo me suena la música a mí. Más bien creo que Ángel Mari se referiría a cómo les pueda sonar a otros. Cada persona tiene su historia, su estilo, su modo de presentarse, sus acentos particulares. Mucha gente en la Diócesis me conoce y otros, que no me habían conocido, preguntan a quienes han compartido vida conmigo. Seguro que hay sectores donde caigo mejor y en otros no tanto. Pero puedo decir que la mayoría de las personas han acogido mi nombramiento como una buena noticia, incluso con expectativas que considero excesivas porque los retos que tiene la Iglesia entre nosotros no dependen de este o aquel nombramiento. Y a los que se animan a felicitarme, porque muchos me dan el pésame, les digo que, en todo caso, mi nuevo ministerio tendrá sentido si es bueno para la comunidad, no para mí. Y eso está por demostrar.
Obispo de la ciudad iberorromana de Basti y Obispo auxiliar de Bilbao. ¿Dónde está Basti y cuáles son tus funciones como Obispo auxiliar?
Lo que fue Diócesis de Basti, se convirtió luego en Diócesis de Baza, provincia de Granada. Posteriormente Baza se unificó con Guadix y actualmente forma parte de la Diócesis de Guadix. Conozco muy poco Andalucía y creo que ésta es una buena ocasión para acercarme algún día por allí y aprender de la historia e idiosincrasia del lugar. Respecto a las funciones de Obispo Auxiliar, en mi caso son las de un vicario general, algo que comencé a desempeñar varios meses antes de que me nombraron obispo y que ahora sigo ejerciendo. A esa responsabilidad se añade ahora un considerable número de celebraciones litúrgicas en diversos lugares, con motivo de sacramentos, fiestas y motivos varios, así como otras tareas que llegan por ser miembro de la Conferencia Episcopal y colaborar en sus trabajos. Ser obispo es algo muy distinto de estar en una parroquia. Como párroco tienes un núcleo de relaciones que van progresivamente ampliándose, pero tu comunidad de referencia es estable y limitada; como obispo, vas conociendo muchas situaciones, saludando a muchas personas y, desde luego, compartiendo comidas y celebraciones aquí y allá. No es fácil comer tantos días fuera de casa y luego seguir activo por la tarde. Pero hay que hacerlo. Así es ahora mi vida.
Ángel Mari escribía también que la diócesis necesitaba una convergencia de sensibilidades y estilos plurales, sin autoexclusiones. ¿Qué panorama te encontraste? ¿Cuáles han sido tus prioridades y preocupaciones?
Ciertamente la comunión es una preocupación de cualquier obispo, porque promoverla, evitando o sanando rupturas dolorosas, es parte esencial de su ministerio. Esta búsqueda de la comunión yo la entiendo en un sentido amplio, y en ella caben, no solo la diversidad, sino incluso los contrastes. Son conocidas las palabras de San Agustín: en lo esencial unidad, en lo dudoso, libertad; en toda caridad. Si uno se mueve en ese espíritu, no tiene todo resuelto porque a veces no es fácil discernir lo esencial de lo abierto a la discusión; pero sin duda esa máxima es un buen punto de partida. Compaginar la gran riqueza de acentos y carismas que conviven en una Iglesia local, con la unidad fundamental de la fe, ha sido una gran fortaleza del catolicismo, y lo seguirá siendo. Este equilibrio es siempre inestable y debe ser una y otra vez reconstruido. En lo que a la Diócesis de Bilbao se refiere, el panorama es de relativa calma: existen por supuesto algunas tensiones entre grupos y sensibilidades que no son fácilmente conciliables, pero no veo rupturas definitivas. El acercamiento y la convivencia en espíritu de respeto ayudan mucho a superar prejuicios y a abrirnos a lo diferente, en un espíritu de diálogo sincero que solo puede inspirar el Espíritu. No están las cosas como para perder energías en batallas internas.
Licenciado en Psicología, doctor en teología, Máster en Economía… El título de tu tesis doctoral es “La guerra imposible” ¿Es la formación la mejor arma para cambiar el mundo?
La formación es una herramienta importante que sirve para entender mejor el mundo y situarse con mayor acierto ante los problemas y desafíos que se van presentando. Pero la formación auténtica solo se consigue si las reflexiones de los libros se contrastan en la rica experiencia de las relaciones humanas, en medio de las tensiones y problemas de la vida cotidiana, en los intercambios con los que piensan diferente, en las decisiones y las acciones que uno va adoptando con aciertos y errores, en la humildad de reconocer estos últimos. En esa tensión, en ese diálogo con la vida y con la gente, es donde la formación se convierte en sabiduría. ¿La formación cambia el mundo? Hay un saber de biblioteca, abstracto, solipsista, incomunicado, que puede producir satisfacción a quien lo cultiva, pero que no cambia nada. Hay otro tipo de formación, muy especializada y limitada en su capacidad de iluminar la enorme riqueza de lo humano y que, sin embargo, por resultar sesgada, ni siquiera es capaz de reconocer sus propias limitaciones. Es lo que está hoy sucediendo con la formación técnica muy específica, cada vez más extendida. Ciertamente esta formación cambia el mundo. De hecho, es la que el sistema económico prefiere y promueve, pero, aunque genere cambios beneficiosos, también es capaz de producir considerables males. Hoy la gente se forma mucho, pero se trata de una formación muy especializada, perfectamente compatible con una gran ignorancia en dimensiones esenciales de la vida y la relación humana. Por otra parte, y para complicar más el argumento, todos hemos conocido a personas que, sin tener “escuela”, nos han demostrado una gran capacidad de vivir con una profunda sabiduría. Estas personas abundan en las culturas tradicionales, y en mis años en Latinoamérica, he podido conocer a muchas. Pero, aunque la “formación” no asegure nada y no sea requisito ni ventaja para seguir a Jesús, hoy es muy difícil hablar de muchos temas y no decir tonterías, si no tienes una formación amplia, y no buscas tiempo para leer algo más que los mensajes de twitter y lo que tus amigos escriben en Facebook.
Benetako hezkuntza liburutakoa bizitzarekin uztartuz lortzen da: liburuetan ikasitakoa giza-harremanen esperientzia aberatsarekin kontrastatuz, egunerokotasunaren tentsio eta arazoen erdian, desberdin pentsatzen duten horiekin ditugun harremanetan, bizitzan zehar hartzen ditugun erabaki eta ekintzetan, eta erabaki eta ekintza okerrak onartzeko apaltasunean.
Has sido vicepresidente de FIARE (Fundación para la Inversión y el Ahorro Responsable) y eres el autor de un libro titulado “¿Ética en los negocios?”. ¿Cuál es la respuesta, es posible una ética en los negocios?
En el mundo de la ética empresarial hay mucho “greenwashing”, es decir, mucha apariencia de compromiso ético, de responsabilidad social y ambiental que, en realidad, son, sobre todo, sofisticada estrategia de marketing. Pero no todas las empresas funcionan igual o se conforman con los mismos estándares éticos: algunas se preocupan sólo del beneficio económico y consideran a los trabajadores como meros instrumentos a los que exprimir, mientras que otras cuidan la dignidad y condiciones del trabajo; algunas engañan con el producto, mientras que otras reflejan con claridad lo que venden; algunas esconden el impacto medioambiental de su actividad, mientras que otras lo reconocen e intentan compensar o corregir esos efectos negativos; algunas asumen más responsabilidades sociales en su entorno, otras hacen lo mínimo para aparentar; algunas desarrollan actividades más perjudiciales para el medio ambiente, como es el caso de las que trabajan con combustibles fósiles, otras promueven alternativas de energía limpia; algunas son más transparentes en todo lo relacionado con la información interna, otras funcionan con mucho hermetismo. Es decir, que en las formas de organización y funcionamiento de una empresa hay una gran variedad de estilos y concreciones, una diversidad de culturas, que tiene una indudable dimensión ética. Es muy difícil que las grandes multinacionales modifiquen significativamente su cultura y compromisos éticos. Pero hay todo un mundo de pequeñas y medianas empresas en las que muchas cosas se pueden hacer de manera diferente y mejor.
El 1 de febrero se celebró en Asís el seminario «Laudato si’, economía y finanzas» organizado por El Grupo Banca Ética (Fiare-Banca Ética y la Fundación Finanzas Éticas). En tu conferencia afirmaste que «La Enseñanza Social Católica es mejor identificando males, que proponiendo remedios; es más sólida en la formulación de principios, que orientando su implementación». ¿Crees que la iniciativa «La economía de Francisco» que tendrá lugar también en Asís entre el 26 y 28 de marzo, convocada por el Papa puede caer en esa inoperancia?
Los principios de Doctrina Social sirven si somos capaces de aterrizarlos. Durante décadas ha habido poca comunicación entre profesores de moral social y el mundo de la empresa. La teología y la economía en nuestro mundo de saberes fragmentados pueden convivir en una misma institución universitaria pero apenas entran en diálogo. Este encuentro de Asís es peculiar, porque va a estar protagonizado por jóvenes economistas y empresarios menores de 35 años. Entre ellos habrá sin duda gente con nuevas ideas; algunos incluso habrán demostrado capacidad de poner en marcha experiencias interesantes, iniciativas creativas, valiosas, que reflejen en mayor o menor grado valores humanistas. ¿Podemos esperar que de allí surja una fuerza capaz de transformar la economía mundial? Eso no va a suceder. Pero tomando en cuenta los negros nubarrones que se dibujan en el horizonte humano y dado que tenemos muchas más preguntas que respuestas, este encuentro genera esperanza y sus resultados pueden inspirarnos vías y remedios. Sinceramente, no creo que, una vez celebrado, en la evaluación del mismo vayamos a considerarlo inoperante.
Crisis económica a nivel mundial, crisis ecológica sin precedentes… ¿La insostenibilidad de las finanzas pueden dejar un espacio para un despertar de la conciencia católica?
El catolicismo, por su misma condición, no va a identificarse nunca en su conjunto con una u otra bandera de cambio social radical. Existirán en su seno personas que busquen y promuevan el cambio, las cuales deberán convivir con otras que se resistan a esos mismos cambios. La identidad católica nunca la encontraremos tras una bandera revolucionaria, aunque sabemos que hay y seguirá habiendo mujeres y hombres católicos que busquen el cambio social y lo entienden como exigido por su fe. Tomemos el ejemplo de la crisis climática y la “Laudato Si”. Incluso si, como es el caso, el mismo Papa es quien promueve el cambio de conciencia y prácticas sociales, la comunidad católica le sigue solo parcialmente y con lentitud, animada en parte por la propuesta papal, pero sobre todo reflejando la lenta evolución de percepciones y sensibilidades que se produce en el conjunto de la población. Específicamente, en lo que a finanzas éticas se refiere, son muy pocas las personas conscientes de la profunda relación existente entre los males del sistema económico y el funcionamiento de los mercados financieros. No hablo solo de los cristianos de base. En instituciones católicas, incluso aquellas que valoran y divulgan la Doctrina Social, está muy poco desarrollada la conciencia de que invertir éticamente es algo más que evitar poner dinero en armas, pornografía o anticonceptivos. Cambiar el mundo significa también cambiar el modo como invertimos y gestionamos nuestros recursos.
Llevas toda la vida vinculado a la pastoral social y a Cáritas. Has estado 12 años en Ecuador. Volviste a Otxarkoaga. ¿Dónde se trabaja mejor por el Reino de Dios: ¿en el fango, desde la base, o desde las esferas donde se toman las decisiones?
Interesante pregunta, en la que me ha tocado pensar más de una vez. Creo que Dios nos llama a actuar en todos los ámbitos: en la base y también en las alturas. Pero también creo que solo lo que hagamos en la base, con generosidad y buscando su Reino, tiene su respaldo pleno. Por eso, si tengo que elegir, me quedo con el trabajo en los barrios, en los pueblos, en las asociaciones, en las parroquias, en las comunidades a pie de calle, en los países del sur. Y ello, independientemente de los resultados, del éxito o fracaso de todos esos esfuerzos humildes y anónimos. En ellos existe la certeza de que Dios está presente, porque Cristo estará siempre con quien le busca en la debilidad, en la propia y en la de los hermanos. También me ha tocado hacer trabajo en las alturas y creo que es bueno y necesario si uno lo hace por las razones adecuadas, pero no tengo tan claro que los esfuerzos por buscar apoyos e influenciar decisiones desde arriba sean tan diáfanos desde el punto de vista evangélico. Insisto, no minusvaloro esos ámbitos de incidencia, solo que no tengo tan clara la motivación evangélica de las personas que prefieren ese tipo de relaciones y las cuidan más que otras. Pero cuidado, porque la Iglesia católica es una comunidad de fe con vocación de influir en todos los niveles donde se juega el bienestar integral del ser humano, ahora incluso a nivel global, y tiene mucho peso en ámbitos específicos de responsabilidad. No podemos tampoco escondernos tras la pretensión de que vamos a poder transformarnos todos y de repente en San Francisco. No digo en franciscanos porque los franciscanos hace mucho tiempo complementaron a San Francisco jaja.
¿Sigues moviéndote en bicicleta por la ciudad? ¿En qué ha cambiado tu vida durante este último año?
Sigo utilizando la bicicleta en la ciudad, que algunos amigos ya han bautizado como el “coche oficial”. En este aspecto, las cosas han cambiado poco, aunque al tener que moverme más por Bizkaia, utilizo más el coche. El cambio mayor se ha producido en el ámbito de las relaciones humanas porque ahora debo relacionarme con mucha gente y en un estilo de comunicación que es, inevitablemente, menos personal. Eso, unido al hecho de que quien te saluda y no te conoce, te percibe como “representante institucional” y esto es nuevo para mí. Y por serlo, debes intervenir en eventos públicos, hablar ante personas que no conoces y que nunca vas a poder conocer realmente. Es algo que, por ejemplo, los cargos políticos tienen que vivir cotidianamente. No me gusta, pero va en la cesta.
Nork bere burua aski izatea, autosufizientzia, ezjakintasunik erradikalenaren ondorioa da. Belaunaldien ahaleginak eraikitako mundu batean bizi gara. Inor ezin da bakarrik jaio, inork ezin du bakarrik biziraun. Besteek eman diguten hori gara, eta itsukeriarik handiena daukagun hori gurea bakarrik dela ustea da. Hala ere “niri inork ez dit ezer oparitu” esapidea oso zabalduta dago. Zentzurik gabeko ideia da, baina onarpen handia du dilema etiko asko konpontzen baititu, eta beste ezerk ez bezala justifikatzen ditu konplazentzia eta solidaritaterik eza.
El VIII informe de FOESSA nos habla de la gran desvinculación. Como consecuencia de la crisis la fractura social es cada vez más evidente. Hace tiempo que escribiste un libro sobre los encuentros entre personas desde la vulnerabilidad de lo que son. ¿Es la ternura un buen antídoto para la autosuficiencia y autocomplacencias?
La ternura es descentramiento, es capacidad de dejarte afectar por el sufrimiento de otras personas, sufrimiento que no es tuyo, pero que asumes tú por sentirte interpelado. Nadie puede asumir la tragedia de los otros al 100%. Pero hay quien es capaz de sintonizar con verdad, y hay quien va a intentar verse afectado poco o nada. En esta asignatura, que es la del amor cristiano con otro nombre, se puede retroceder y se puede avanzar. Para mí la autosuficiencia es la ignorancia más radical. Nacemos en un mundo construido con el esfuerzo de generaciones. Nadie puede nacer solo, nadie sobrevive solo. Somos lo que otros nos han dado y la mayor ceguera es creer que lo que tienes es solo tuyo. Y, sin embargo, la convicción de que “a mí nadie me ha regalado nada”, que oímos en diversas fórmulas y variedades, está muy extendida. Es una idea absurda pero que tiene gran aceptación, porque resuelve muchos dilemas éticos y justifica como ninguna otra la autocomplacencia y la insolidaridad.
Siendo Juan Mari Uriarte Obispo de Bilbao, y antes de irte a Ecuador, fuiste un testigo cualificado del proceso de paz. ¿Cuáles son las mayores dificultades con las que encontraste?
El asunto empezó cuando Juan Mari Uriarte, en el año 1998, era Obispo de Zamora. En el contexto de una tregua de ETA, el gobierno español le pidió apoyo técnico para abrir una línea de comunicación y, como él se encontraba lejos del País Vasco, Juan Mari solicitó mi colaboración. Lo que hubo que hacer se realizó con discreción y seriedad, pero, sinceramente, no lo considero, ni relevante, ni meritorio en absoluto. Me ha tocado hacer otras muchas cosas más significativas, aunque tengan menos interés mediático. Aquello fue el producto de una casualidad, más que otra cosa. Algo que, además y como luego se demostró sobradamente, no tenía mucho recorrido porque ETA ha tenido que verse muy débil para aceptar lo que finalmente ha acabado aceptando: que el asesinato de tantas personas, además de ser injustificable moralmente, tampoco ha servido para acercar la autodeterminación que era su objetivo. Pero la incapacidad de ETA para madurar política y moralmente, debida en gran parte a la inestabilidad de su liderazgo volátil, es, en sí mismo, todo un tema.
¿Cómo ves en general a nuestra Iglesia? Hay un derrumbamiento respecto de lo cristiano, una especie de desapego y sospecha. ¿Qué está pasando?
Es muy difícil entender lo que está pasando porque la secularización en el País Vasco, por su contundencia y rapidez, es peculiar. Se habla de que Cataluña tiene niveles similares o incluso más altos de secularización, pero allí el proceso viene de lejos y ha sido más progresivo. Aquí en dos generaciones hemos pasado de “euskaldun fededun”, a escuchar en muchos ambientes que la Iglesia, incluso la religión cristiana, es una realidad irrelevante, cuando no perniciosa para la vida de la gente. Esto en parte tiene que ver con errores propios que han alimentado un fuerte deterioro de nuestra imagen. Pero hay mucho más que eso y creo que las claves de lo que está sucediendo no han sido todavía suficientemente reflexionadas. .
Besteenganako dugun ardura ongia egiteko erabil daiteke, baina baita mina emateko ere. Badakigu Elizak ez duela beti zintzo jokatu, egia da batzuk boterea ahulagoak direnak behartzeko erabili dutela. Elizak, eragindako mina onartu behar du eta abusatu dutenekin irmo jokatu. Biktimak entzun behar ditu, haien testigantza sinistu, haiekin hitz egin, lagundu. Horrek guztiak lehentasuna dauka.
¿La Iglesia ha de ser valiente para abordar con transparencia los abusos que ha cometido en su historia más reciente?
Todas las personas con algún tipo de responsabilidad sobre otras, pueden utilizar su ascendiente para hacer el bien o para hacer daño. Sabemos que no todo es trigo limpio en la Iglesia y que algunos han utilizado su proyección social para abusar de otros más débiles. Debemos reconocer ese daño, confrontar a los abusadores, y hacerlo con determinación y contundencia. Escuchar a las víctimas, creer en su testimonio, dialogar con ellas, apoyarlas en todo lo posible, es una prioridad. Nuestra responsabilidad va más allá de lo legal, porque estos abusos dejan una huella profunda que no prescribe. Debemos aceptar las críticas y mejorar nuestra disposición a aceptar y asumir lo que no nos gusta, debemos cuidar nuestros protocolos, tanto para acoger las denuncias, como para prevenir cualquier daño futuro. Dicho esto, no es justo que algunas personas vean un cura y lo consideren como un abusador en potencia por el hecho de ser célibe. Estos abusos, siendo muy graves, no pueden hacernos olvidar que, de esa misma Iglesia, en cada momento de la historia ha surgido un gran número de personas integras y generosas, capaces de entregar su vida para mejorar la situación de jóvenes y de tantos grupos sin esperanza. Eso ha sido así y sigue siendo cierto hoy.
¿Cómo ser hoy cristiano en esta sociedad laica, lejana a todo planteamiento religioso?
No hay más que un modo de ser cristiano: entender la vida como un don, intentar vivir según la propuesta del Evangelio, pedir en la oración que llegue el Reino de Dios, colaborar con Cristo en hacer realidad su sueño para la humanidad, alimentar la misericordia con la Palabra y la Eucaristía. Durante algún tiempo hemos creído que, si éramos auténticos, íbamos a poder contagiar a otras personas que reconocerían el valor de la propuesta. Ahora sabemos que en Europa la cosa va a estar bien difícil, al menos en las próximas décadas. Así que tocará asumir que somos los raritos, los que creen y hacen cosas que la mayoría considera ya superadas y sin sentido. Si a esto le añades la percepción de que la Iglesia es una estructura de poder, con privilegios, pues te puedes imaginar lo fácil que va a estar esto. No se trata de hacer victimismo, pero si van a ser tiempos duros en los que las palabras de Jesús en las que anuncia incomprensiones e incluso persecuciones, van a sonar con nueva fuerza en la comunidad de creyentes. Eso sí, todo esto hay que vivirlo en un profundo espíritu de mansedumbre, como una invitación de Cristo a purificar y fortalecer nuestra fe, poniendo nuestra confianza solo en él y no en tantas cosas que nos daban una falsa seguridad.
¿Y cómo te imaginas el cristiano del futuro, la Iglesia de mañana?
Ay Dios! Eso de “el cristiano del futuro”. No hay una respuesta unívoca a esa pregunta porque hay muchos tipos de cristianismo y muchos contextos enormemente diversos. Primero, porque los cristianos lo son en una tradición eclesial. Nosotros somos cristianos católicos y este calificativo nos define porque define muchas cosas: ministerialidad, eucaristía, espiritualidad, devociones, religiosidad popular, compromiso social y político, muchas cosas que nos hacen distintos a otras tradiciones cristianas, ortodoxas, reformadas y demás. Segundo, y centrándonos ya en el catolicismo, el mundo es muy grande y, aunque algunos aquí crean lo contrario porque piensan que lo que aquí está sucediendo antes o después va a pasar en otros sitios (otra expresión del sentimiento de superioridad europeo), lo cierto es que el catolicismo va a tener un considerable desarrollo en gran parte del planeta. Así que no es nada fácil responder a la pregunta. Pero si esta se refiere a nuestra Iglesia y aquí, en el País Vasco, la veo en 50 años mucho más reducida que ahora, y más identificada en torno a la Eucaristía y la Palabra de Dios, con menos relevancia pública y fuerza institucional, viva en algunos lugares y desaparecida en otros.
¿Qué relación mantienes con los franciscanos de Irala de Bilbao?
Justo el 1 de enero estuve celebrando con ellos los 50 años de la parroquia y les conté que en un local juvenil que tenían, convertido el domingo por la tarde en discoteca popular, encontré y tuve durante un tiempo mi única novia. Esto era en 1974. A la novia tuve que dejarla para entrar al seminario en 1975 pero tengo un buen recuerdo de aquello. Más allá de eso, y de que Lidia, una amiga mía ya fallecida que trabajaba en el obispado era feligresa y por eso sabía que había un coro, no he tenido hasta ahora otras oportunidades de relacionarme con la comunidad. Ahora como obispo tendré más.
Eskerrik asko!
Lehenengo galdera: Nor da Idoia Makazaga?
Idoia Makazaga Zarauztarra, 49 urte bete berriak. Benetan urte berria da aurtengoa, hogei urte pasa baititut Hondurasen, eta maiatzean urte bete etorri nintzala. Beraz, gauza berri pila bat ikasten ari naiz; edo zahar haiek berriro berrezagutzen. Bueltatzea erronka handia izan da, baina gustura.
Hogei urte Hondurasen, zergatik?
Nik María Inmaculada ikastetxean ikasi nuen, Zarautzen, eta han bazegoen gazte-pastoraltza eta haien bitartez aukera izan nuen kanpamentutara joateko, Pazkoetara, konbibentzietara... Udara batean norabait joateko aukera bota zuten eta Kubara, La Habanara joateko aukera izan nuen. Ordurako jada unibertsitatean nintzen, eta bi udaratan jarraian joan nintzen Kubara. Karrera bukatu nuen, baina harra hortxe neukan: beste batzuk joan zirela itsasotik beste aldera, denbora gehiagoz, eta ni zergatik ez? Lanean hasiz gero, dirua jaso eta bizimodu batera jartzen edo ohitzen zara... eta esperientzia hura probatzera ausartu nintzen. Probatu, probatu, eta konturatu gabe hogei urte pasa dira.
Hogei urte leku berean, Hondurasen?
Bai, Hondurasen, leku berean, San Pedro Sula izeneko hiri batean (Honduras eta Guatemalaren arteko mugan, hasieran hamahiru urtez, eta gero, azken zazpi urteak, Moskitian, Honduras eta Nikaraguaren arteko zonaldean. Biak Honduraseko iparraldean daude, Karibe itsasoari begira, baina bata mendebaldean, eta bestea ekialdean. Moskitiako eremuari “La pequeña Amazonia” deitzen diote, dena ureztatuta dago, manglez beteta. Ez dago karretara bat bera ere, garraiobideak ibaiak dira. Biosfera handi bat dago Patuka eta Platano ibaien artean, baina zoritxarrez, bertako oihana eta kaobak eta desagertarazten ari dira.
Hamahiru urte hiri batean, hirietako arazoekin, eta gero indigenen artean.
Zure kasa ibili zara Hondurasen, edo eta erakunderen batekin egon zara han?
MISEVI elkartearekin egon naiz Hondurasen, “Misioneros Seglares Vicencianos” elkartearekin. Vicente Paulen eta Luisa Marillacek karisma familiaren inguruan sortutako laikoen elkartea da. Adarretako bat gazteei zuzendutakoa JMV da, eta MISEVI handik sortu zen, laikoen artean misioa bokazio modura bizitzeko aukera eta bidea emateko. Izan ere, misiotan epe luzean gelditzeko aukeratuz gero, laikoa elizaren barruan ezer gabe gelditzen da. MISEVI egoera horri irtenbide bat emateko sortzen da: azpiegitura eskaini, gizarte segurantzan kotizatzeko aukera eta abar... Misioetako bokazio laikoari nolabaiteko legezko estaldura eskaini nahi dio MISEVIk.
Batek nola daki misioetarako bokazioa daukala?
Egia esan ez dakit. Nire kasuan droga moduko zerbait izan da: probatu nuen, eta hogei urte. Zerbait berezia da. Askotan egin diot galdera neure buruari: nola da posible hemen hain ondo egonda, karrera bukatu berri eta lanean, eta kanpora joatea erabakitzea... Hemen ere badaude lekuak boluntario-lana egiteko, badago non lana egin, hemen ere hainbeste zeregin egon eta ez, misiotara. Errealitate hura han dago eta beste indar bat dauka. Barruan sentitzen nuen behar bat zen. Aukera izan nuen joateko. Egia esan, horrelako aukerarik ez bazitzaidan parean tokatuko, bizitza beste modu batera antolatuko nuela. Nere kasuan hain gertu eta hain erraz izan nuen aukera... joan egin nintzala.
Akaso jende askok ez dauka horrelako aukerarik horrelako zerbait probatzeko. Elizan bertan oso sartuta eta gertu egon behar zara misiotara joateko. Beste erakundeetan oso profesionala izan behar zara beraiekin joateko, ikasketa zehatzak izan behar dira. Elizan ez da profesionaltasun hori eskatzen, prestakuntza bai noski, agian horrek errazagoa dela dirudi, baina uste dut ordainetan edo, konpromiso handiagoa eskatzen dela. Beste bide bat da.
Hondurasera joan zinenean, 98an, Mitch urakanak astindu zuen herrialde hura. Nola bizi zenuen hemengo ongizatetik txikitutako lurralde batera joatea?
Mitch urakana gertatu zenean gu Madrilen geunden hiru hilabeteko prestaketa jasotzen. Oso telebista gutxi ikusten genuen, eta nahiz eta jakin Hondurasen urakana izan zela, ez genuen irudirik ikusi. Urtarrilaren 15erako Hondurasen nintzen (urakanak urriaren 29an jo zuen Honduras). Iritsi ginenean, oraindik ere lokatza etxeetako sabaietaraino zegoen, jendea gauzak ateratzen. Bi hilabete eta erdira iritsi arren egoera ikaragarria zen. “Soy damnificado del Mitch” esaten zuen jendeak.
Laguntzak eta iritsita zeuden, baina hilabeteak pasa genituen kontainerrak jaso eta jaso. Aireportura joan, tramiteak egin, hustu, banatu, sailkatu... Gauzak eta dirua iritsi ziren, ia Honduras goitik behera berreraikitzeko, baina betiko modura, gauzak bidean galdu egiten dira... Pentsa Suediak zubi bat berreraikitzeko dirua eman zuen, eta zubi hura egingo zela ziurtatzeko bertako ingeniariak etorri ziren. Ospitale bat Japoniak egindako diru laguntzarekin egin zen. Guztiz hornitutako ospitalea gobernuari eman zitzaion. Pertsonala jartzea besterik ez zen falta. Bi urtez hutsik egon zen, gobernuak ez zuelako ezer egin.
Horrelakoak asko gertatzen ziren. Gero, egia da, “Ayuda Humaniaria” lelopean zenbait enpresa aprobetxatu egiten direla. Hemen, mendebaldean, soberakinak hara bidaltzen dira, hemen zer egin ez dakigun hori hara kontainerretan bidaltzen da. Ordainetan hemen zerga gutxiago ordaintzeko, desgrabatzeko edo ez dakit nik zertarako, baina kontua da gorbataz betetako kontainer bat jaso genuela...
Hutsetik hasita herri bat berreraiki daiteke?
Ikaragarria da jendeak zer kapazitate daukan berriro hasteko, behin eta berriz. Jende askok zeukan guztia galdu zuen. Horrelakoak, gainera oso sarri gertatzen dira: urakana ez bada ekaitza da, edo lehortea edo... Erori, altxa, eta aurrera. Beti.
Baina horrek ez al du etsipen puntu bat sortzen jendearengan?
Beti aurrera. Jendeak han esaten zuen: “primero Dios, que saldré adelante”, eta aurrera. Eta noski zuk aitatzen duzun etsipen puntu hori ere badagoela. Osasun mentalaren arloan datuak hortxe daude, suizidio-tasa handiak daude, alkohol eta droga kontsumo handia, indarkeria, narkotrafikoa barruraino sartuta dago. Egia da, jendea, etsi etsian, utzi egiten da. Baina gehienetan berriro hasteko gogoa eta asmoa ere badu jendeak.
Jende langilea, beraz.
Bai, jendeak lan asko egiten du, baina askotan ez dio ezertarako balio.
Hondurasek immigrazio arazoa bi alderdietatik bizi du: jendea bertatik badoa, eta beste herrialdeetatik Ameriketako Estatu Batuetara doazen hainbat migratzaileen bidean dago...
Aspalditik esaten da Hondurasek pobreak esportatzen dituela, Honduraseko aberastasun handiena kanpora joan diren horien dibisa-bidalketatik dator, ordea. Estatu Batuetan eta orain Europan, nola edo hala lana bilatu eta, gutxi bada ere, jendeak etxekoei bidaltzen die dirua.
Honek familietan ikaragarrizko eragina dauka: familietan bat joaten bada, bertan gelditutakoak haren zain gelditzen dira, zer bidaliko duenaren zain. Alde ezkorrena hau da, gazte askok ofizioren bat ikasteko asmoa galtzen duela, ezer egin gabe dirua baitator etxera... Horrek min handia egiten du. Aitona-amonak hartzen dute umeen zaintzaren ardura, gurasoak atzerrira joan dira lan bila, oso baldintza gogorretan. Nerabe horiek gurasorik gabe, aitona-amonaren esanetara, diru errazarekin... Horrek guztiak ikasteko eta lana egiteko gogoa zapuztu egin du gazte askorengan, eta beste arrazoi batzu gehituz, gizartea desegin.
Gizartea desegin egin dela diozu. Hondurasen ez dago gizarte-egiturarik?
Ez, edo, badago oso ahuldua. Elkarteek eta oso indar gutxi daukate. Ez dago elkarrenganako konfiantzarik. Eta gizartea uztartzeko ezinbestekoa da konfiantza. Adibidez, 2009an izandako estatu-kolpearen aurrean horrek egin zuen huts: kolpeari aurre egiteko ez zen modurik egon jendea elkar zedin, zein zeinekin fidatu? Zeinek agindu, dirua nola banatu, zeini sinetsi... beti dago arrazoiren bat taldearen indarra desegiteko. Feminismo edota ingurumenaren zaintzarako zenbait liderren heriotzak hortxe daude, Berta Cáceres adibidez.
Zergatik ordea elkarrekin aritzeko ezintasun hori?
Nik uste dut aspalditik datorrela. Bananerak lehenengo eta 80. hamarkadan Ertamerikan izan zen gudan, Estatu Batuek Honduras bere “lagun militar” bezela izendatu zuten. Alderdi eta sindikato ezkertiarrak (gaur egun desagertuak), baita Jesuiten inguruan antolatutakoak ere apustu sendoa egin dute, eta egiten ari dira, giza eskubideen alde. Horrelakoetan Estatuak egurra eman du eta denak paretik kendu. Eskuinak beti ezkerra demoniatu egin du. Politika mailan ere bi kolore bakarrik daude: urdinak eta gorriak. Urdinak nazionalak dira, eta gorriak ez dira ezkerrekoak, liberalak baizik. Biak eskuinekoak, biak kapitalista basatiak. Nire ustez gizartearen aldeko indarra beti ezkerretik dator, baina eskuinak ez du hori nahi. Migrazio asko etorri zen mundu arabiarretik eta horiek daukate boterea eta dirua Hondurasen momentu honetan.
Arabiarrak Hondurasen?
Bueno, arabiar, palestinar otomandar... Horiei guztiei ‘turko’ deitzen zaiei Hego Amerika guztian, eta XX. mende hasierako Inperio Otomandarretik etorritakoak dira. 30. hamarkadan ere palestinar asko etorri ziren Hondurasera. San Pedro Sula bihurtu zen 60. hamarkadan Herrialdeko hiriburu industriala. Kapitala arabiar jatorriko familia hauena zen. Harrezkero Hondurasen dirua, boterea eta enpresak familia horien esku daude. Hor daude Rosenthal, Kafati, Canahuati, Sikafy...
Familia guztia horiek Hondurasera etorri ziren, nolakoa da Hondurasek egun bizi duen migrazioa, batez ere San Pedro Sulan?
Bai, migrazioaren arazoa handia da Hondurasen. Jendea irteten ari da Hondurasen ezin delako bizi: lanik ez dago eta indarkeria bortitza dela eta han ezin da egon.
Marak direla eta mutilak eskulan modura hartzen dituzte, eta neskak jolaserako, badakizu. Mara hauek gazteez osatutako kuadrila kriminalak dira. Estatu batuetan sortu ziren XX. Mendeko 80. hamarkadan El Salvadoreko gazte migratzaileak Honduraseko eta Guatemalako gazte migratzaileekin elkartu ziren beste pandilla mexikar, afro-amerikar eta abarretatik Los Angeleseko kaleetan zehar babesteko. Oso talde biolentoak ziren “La 18” edota “Mara Salvatrucha”. Gertatzen da ordea Estatu Batuek han atxilotutakoak jatorrizko herrialdeetara deportatzen zituztela (dituztela), eta beraien herrietan berrantolatu egin direla. Berrantolatu eta banandu ere bai, eta hemen beraien arteko borrokak daude. Narkotrafikatzaile handien morroi bihurtu dira, armen eta drogen trafikoan sartuta daude. Erdialdeko Amerikan 80. hamarkadan egondako gerren armak Kolonbiara joan ziren drogen truke.
Pandilla horiek izugarriko mina egiten ari dira Hondurasen: batetik bertako neska-mutila errekrutatze dituztelako; eta bestetik, auzoz auzo zerga moduko bat eskatzen dutelako. Ordaintzen ez duenak badaki zer dagoen. Horrek merkataritza eta lanpostu asko desegin ditu. Negozio asko eta asko itxi egin dira, jende askok mehatxuengatik ihes egin behar izan du. Polizia guztiz dago kakaztuta sare hauetan. “Estado fallido”, “Narco Estado”
Egoera horrelakoa izan arren, zuk han hogei urte egin dituzu!
Ikuspegi makro horretatik herrialdeak ez dauka inongo konponbiderik. Baina arrazoiak bilatu behar dira han lana egiteko. Makro-mailan ezer gutxi dago egitea holako lankidetzarekin, baina banaka banaka zenbait pertsonei gauzak pixka bat errazten eta itxaropen apur bat ematen aurkitzen du batek, han lana egitearen zentzua.
Hogei urte horietatik 13 urte San Pedro Sula bezalako hiri handi batean, kaosaren erdian gauza txikitan itxaropena ereiten. Etsita eta nazkatuta joan zinen gero Moskitiarako oihanera?
San Pedro Sulan Aita Paulen Misioaren Kongregazioarekin geunden. Hasiera hasieratik Honduraseko Iparraldeko kostalde guztian egin izan dute lan 1910. urtean hasi ziren bertan. Hogeita hamabost urte baino gehiago daramagu Bixentiar laikook han lanean, eta jendea eta taldeak prestatu ditugu. Ikusten genuen etapa bat bukatuta zegoela eta hango lana uzteko moduan zegoela erabaki zen. Beste norabait joatea proposatu ziguten, Moskitiara.
Oihaneko bazter hartan dena egiteko zegoen. Batetik edozein lekutik oso urruti dagoelako, iristeko hegazkinez, eta gero txalupan. Ez dago errepiderik. Espainola oso gutxi egiten da, bertako hizkuntzak daude. Jendea eguneroko gauzekin bizi da: baratzea, ibai edo itsas arrantza, eta noiz edo noiz ehizatzen dutena. Oso oinarrizko bizimodua da, argi indarrik ez dago, euri ura edo ibaitik jasotzen dana.
2011an joan nintzen hara eta 2019an bueltatu naiz hona.
Zergatik bueltatu zara?
Aita Paulen Misioetarako Kongregazioan aldaketak egon dira. Lehen lau probintzia ziren eta orain bitan elkartu dira. MISEVI oso txikia da, eta bere kasa, bakarrik, ezin du horrelako proiektuetan sartu. Aurrekontuak egiten dira: halako lekuan egiteko halako proiektua aurrera eramateko, hainbeste behar da; guk hainbeste jartzen dugu, zuek ez dakit zer... Kontua da ez zigutela berritu han egoteko kontratua, eta utzi behar izan genuen. MISEVIk badauzka beste bi komunitate: bat Bolivian eta bestea Angolan.
Hogei urte horietatik zerekin gelditzen zara, eta zer galdu duzu han?
Ez dakit, nik han eskertzeko esperientzia bat izan dut. Han pasatako hogei urteak bizitzak eskaini didan guztiarekiko eskertza-ariketa bat baino ez da izan. Hori guztia bizi ahal izanaren esker handiarekin gelditzen naiz. Hori ekarri dut Hondurasetik: bizitza ulertzeko modu bat ikusi dut han.
Zein da bizitza ikusteko modu hori?
Itxaropena. Denak dauka itxaropena. Merezi du. Nahiz eta egoerarik zailena izan, nahiz eta ezer ez ulertu, nahiz eta muturreko ezintasuna sentitu egoera guztiek daukate zentzu bat. Akaso orain ez dugu ikusiko, baina beti dago gauzak hobera joango direnaren itxaropena. Beraiek “buscar el lado amable de la vida” esaten dute. Bizitzako guztiari alde xamurrena bilatzen saiatu. Jarrera hori oso baikorra da bizitzarekiko. Han oso egoera latzak ikusi ditut, baina aurrera! Minak eta negarrak hor daude, ez dira ukatzen, baina aurrera egiteko ahalmen hori izugarria da.
Aurrera jarraitzeko grina horrek elikatzen du migrazioa. Nahiz eta hemen (Hondurasen) ez izan nola bizi, beste nonbaiten hasteko asmo izan eta berriro indarrak bildu bidea egiten jarraitzeko.
Zu ere, orain urte bete, bueltan etorri zinen...
Itxaropena behar beharrezkoa da bizitzan. Bestela zentzua galtzen da. Moskitiako kontratua ez zigutenean berritu eta hona etorri behar izan nuenean pott gelditu nintzen. Sei urte ondoren bertako hizkuntzan maneiatzen hasi eta bat-batean berriro hona. Hogei urte han pasatu ondoren nola hasi berriro hemen?
Bizitza aurrera doa, ordea. Atzera begiratu, eta neure buruari zera galdetu nion: zein jenderekin egon naiz? Zein esperientzia bizi izan ditut? Zer ikasi dut hori guztiagatik?, Atzera begiratu, ikasitakoa jaso, indarrak hartu eta aurrera begira, zer eskaini dezakezun galdetu.
Nondik hartu ditu indarrak Idoiak hogei urte misiotan Hondurasen pasatzeko eta hemen, zerotik, berriro hasteko?
Ni sinestuna naiz eta hor aurkitzen dut indarra, Jainkoarengan... Lagunengan eta familiarengan ere bai. Harremanetan, hor bilatzen dut indarra eta baita aurkitu ere.
Non eta zertan ari zara lanean etapa berri honetan?
Errenteriako Gurutze Gorrian ari naiz. Arlo sozialean oso sartuta dago eta jendeari harrera egiten dio identifikatutako beharren arabera Gurutze Gorriko beste bulegoetara bideratzeko. Askotan gizarte zerbitzutan izan duten erantzunak sortutako frustrazioak guregana ekartzen ditu. Bertako arduradunek ikusten dute antolaketa mailan aldaketa sakonak egin behar direla eta horretarako niri deitu zidaten. Haien ustetan, hogei urte kanpoan egonik, pertsona aproposena nintzen ideia berriak eta bide berriak bilatzeko. Dokumentu pila irakurtzen ari naiz, hausnartu, proposamenak eskaini... Proposamen horiek onartzea besteen esku dago, baina ni horretan ari naiz. Oso gustura.
Han ezer ez, eta itxaropena; hemen denetik, eta etsipena. Nekatuta dagoen gizarte bat da hemengoa? Nola bizi du Idoiak aldaketa hori?
Nere ustez beti erne egon beharra dago beti baitago etsipenean erortzeko arriskua, itxaropena galduta norbera gris bihurtzeko arriskua. Mugikor bat, bi, bai eta lau ere. Oso erraza da gauzak biltzeko eta edukitzeko arrisku horretan erortzea. Denok daukagu hausnarketa egin beharra. Nondik jo nahi dugu? Geure buruarekin zorrotzak izan behar gara eta galdetu benetan zein behar ditugun, eta beharrak eta kapritxoak bereizten ikasi. Hori beharrezkoa da. Egunerokotasunaren errutinak asegaitzak bihurtzen gaituen pilaketara eramaten gaitu.
Austeritatea, kontsumoa gutxitzen saiatu... Hori guztia bat dator demanda ekologikoekin. Mundu bakarra daukagu eta txikitzen ari gara. Elkarrekin bizitzeko ere begiratu beharko dugu besteari zer falta zaion. Akaso guk gehiegi daukagu.
Badirudi ingurura begiratzeko beldurra daukagula. Begiak pixka bat irekita gizartean daukagun desoreka soziala nabaria da. FOESA txostenaren datuak ikaragarriak dira.
Txosten horrek loturarik gabeko gizarte batean bizi garela dio. Zer esan nahi du horrek?
Gizartea loturarik gabekoa dela esateak horixe esan nahi du: gizarteko partaide modura ez garela elkartu, edo eta ez garela elkartu nahi. Hemen ere ez dago gizarte egiturarik. Herritan elkarteen egoerari begiratuta gauzak asko aldatu dira. Lehen gizarteko hainbat arlotan elkarteek gauza ugari egiten zituzten (kulturan, kirol mailan, festak antolatzeko, laguntzeko...). Erakundeak dirua jartzen hasi zirenean mugimendu hori guztia desegiten joan da, indarra galtzen, domestikatzen. Halako batean erakunderen batek diru gutxiago jartzen badu, gauzak ez dira egiten, edo eta gehiago eskatzen da. Galdera da zeinentzako ari gara gauzak egiten: udaletxearentzat, herriarentzat, norberarentzat... Uste dugu gauzak debalde egiten baditugu ‘tontotzat’ hartuko gaituztela.
Migrazioa dela eta, zer iruditzen zaizu Europan gertatzen ari dena?
Lotsagarria da. Horretan naziak baino okerragoak garela iruditzen zait. Europak ez du kanpotarrik nahi, ateak itxi ditu eta jendea Mediterraneoan itotzen uzten ari da. Eta Lesbosen jendea uharte koxkor-baten gainean pilatuta, pixkanaka hiltzen. Ez dut ulertzen gizakiak gaiztoa izateko duen ahalmena. Historiari begiratu eta aro guztietan gizakia batera eta bestera mugitu izan da bizitza hobe baten bila. Guztiok gara migratzaileak. Eta egun, diruak eta merkantziek mugak libre, pertsonok ez.
Zure ustez gaizkia banalizatu egin dugu?
Bai. Adibidez, Parasitos eta Joker film berriak horren salaketa modura ikusten ditut. Hor ikusten da egoera limiteak eta muturreko pobrezia normaltzat jotzen ditugula eta egoera horietan putzura erortzeko arriskua ikaragarria dela. Bi pelikula horiek zer gizarte mota eraikitzen ari garen jartzen dute begi-bistan, eta ikusezin diren gizarte horren ondorioak. Denok eror gaitezke hor. Loturak galdu dituen gizartearen ondorioa.
Feminismotik datorren zaintzaren aldarriari heldu behar diogu lotura horiek berreskuratzeko? Zaurgarriak garela konturatu behar gara elkar zaintzeko?
Nik uste dut zaintzaren gaia norberaren barrutik atera behar dela. Elkar zaintza kanpotik datorren behar modura ikusten badugu zaintza horrek alde batera utzarazi digunari begira pasako dugu denbora. Orain arte zaintzaren mundua emakumearentzat nahitaezko zerbait izan da. Nere galdera da askatasunez aukeratu ahal izanez gero ea bestea zaintzea aukeratuko genukeen. Zaintza, bokazioz, askatasunetik jaio den apustu pertsonal modura hartuta, zerbait aberasgarria da irabazi bezala ikusiko da; obligazioz egiten bada beti galdutakoa izango dugu buruan.
Zaurgarritasunari buruzkoa oso ondo dago zaintzarako, baina inork ez du esaten ahula dela eta bestearen beharra daukala. Iruditzen zait batzuetan autosufizientziatik eskaintzen dela zaintza: nik besteei. Kontraesanak ikusten ditut. Guztiok galdetu beharko genioke geure buruari zeinen aurrean agertzen garen zaurgarri eta zeinen aurrean ahalguztidun. Zer gara benetan? Akaso biak... Hainbat arlotan beharrak ditugu, baina beste hainbatetan gaitasunak ere bai. Jarri bi eskuak, bat emateko, eta bestea jasotzeko. Prest al gaude bestearen aurrean horrela azaltzeko?
Elizan ere “Emakumeen matxinada. Berdintasuna ohitura bihurtu arte”. Nola ikusten duzu emakumea Elizaren barruan?
Oraindik ere elizak aldaketa izugarriak egin behar ditu. Eta aldaketa horiek barrutik egin beharko ditu, batez ere Eliza gizartearekiko urruti jarri delako eta Eliza bera ere urrundu egin delako. Bai, urrundu gara eta urrundu ditugu.
Eliza berak duen egiturarekin zaila ikusten dut aldaketarik gertatzea, baina mugimenduak badaude, eta asmoak ere bai. Jendea, emakumeak, prestatzen ari dira. Ez dakit noiz ikusiko ditugun aldaketak. Ez dut itxaropenik galtzen, eta lanean jarraitu behar da, azpiko lana. Eliza bizirik dago.
Posible al da gaur egungo mundu errealean fededun izatea?
Gauzak aldatzen doazela uste dut. Lehen zorotzat hartzen zintuzten mezetara zindoazela esaten bazenuen. Gero indiferentziarik handienean erori ginen: bost axola sinestun zinen edo ez. Orain batzuk sinesten duzun horri buruz errespetu guztiarekin galdetzen dizute. Ez dut uste transzendentziarekiko bilaketa hori inoiz galdu denik. Uste dut jende asko dagoela bilaketa horretan, modu batera edo bestera, eta elkar errespetatuz asko ikasi dezakegula uste dut. Gaur egun fededun guztiok galdetzen diogu geure buruari zergatik sinesten dugun. Nork bere buruari emandako arrazoiak dira besteen aurrean jartzen direnak.
Fedea egun posible da, baina fede hori indar dezakeen komunitatea botatzen dut faltan nire inguruan. Han, Hondurasen komunitate horiei esker bizitza eta hitza bat ziren fede-komunitate haietan bere apaltasunean oso hausnarketa sakonak egiten ziren. Horren beharra somatzen dut hemen. Loiolan, Arantzazun, badaude horrelakoak, baina herrietan ez.
Nolakoa da Idoiak aurkitu duen Jainko hori?
Errukitsua, alaia eta eskuetan erraz eramaten zaituena.
Aspaldian Arantzazun egon al zara? Eta zein oroitzapen etortzen zaizkizu gogora?
Uf, bai, aspaldian Arantzazun egon gabe... Eliza, dorreak eta mendiak. Horixe izango litzateke Arantzazuri buruz dudan irudia, eta gero hortxe, erdi erdian Ama Birjinaren iruditxoa. Txikia baina indartsua. Leku lasaia espirituz betea.
Eskerrik asko!
Ezagutzen ez duenarentzat: zer da Biziraun eta zergatik sortu zenuten?
Biziraun oso elkarte txikia eta sortu berria da. 2016aren bukaeran sortu zen. Komunikabideetan ateratzen joan gara eta ari gara gure lekutxoa egiten. Oso helburu konkretuarekin sortu zen: zoritxarrez, suizidio bidez gertuko norbait galdu dutenentzako espazio bat aurkitzeko eta elkarri laguntzeko borondatearekin sortu zen. Gure helburua elkarri laguntzea da.
Zergatik sortu genuen? Garai hartan hemen ez zegoelako ezer ere. Gaur egun ere apenas. Bartzelonara joan ginen eta han Cecilia Borrásen DSAS elkartea ikusi genuen (Después del Suicidio Asociación de Supervivientes). Cecilia da guretzat erreferentea izan den emakumea. Hemen ere zerbait egiten saiatu beharko ginatekeela pentsatu genuen.
Biziraunek helburu desberdinak ditu, baina nagusiena da, zoritxarrez suizidiorengatik norbait hil zaionari lekuren bat eskaintzea bere behar horri irtenbideren bat aurkitzeko. Elkar-laguntza taldeen bidez saiatzen gara zama astun hori pixka bat arintzen.
Horrenbestez, suizidioaren bidez norbait galdu duena 'superviviente'a da?
Hori ez da guk asmatutako hitza. Ni ez naiz 'super' ezertan kontsideratzen. Estatu batuetatik datorren termino bat da eta suizidioaren bidez hil den norbait galdu dugunoi horrekin identifikatzen gaituzte. Suizidioarekin identifikatuta 'superviviente' hitza entzuten baduzu, oso gertukoa den norbait suizidioaren bidez hil zaion pertsona da.
Ez da teknizismo bat, egoera latz eta gogor baten ondoren bere burua aurrera atera duen pertsona da supervivientea.
Erabiltzen den beste hitz bat 'sobreviviente' da, kasu honetan suizidio saiakera bat egin ondoren bizirik atera den pertsonari buruz ari gara.
Oraintxe aipatu duzu Biziraunen helburua supervivienteen beharrak betetzeko espazioak sortzea dela. Zein behar dira horiek?
Bizitzari bere horretan heltzeko oinarrizko behar bat, bizitzari zentzu bat aurkitzeko. Horrelako zerbait gertatzen zaizunean, hurbileko norbait suizidioaren bidez hila dela alegia, zure bizitzako oinarrizko zutabeak desagertu egiten dira guztiz.
Horrelakoetan New Yorkeko dorre bikiekin gertatu zen antzeko zerbait gertatzen dela esan daiteke. Horrela irudikatzen da oinarrizko zutabeen desagerpena. Nik are eta gehiago esango nuke: dorre bikiak erori zirenean, han zoru bat gelditu zen. Hurbileko norbait suizidioaren bidez hiltzen denean, ingurukoak zorurik gabe gelditzen dira, espazioan grabitaterik gabe egongo bazina bezala, noraezean. Momentu horretara arte ikusi eta landu duzun guztia desagertu egiten delako, suntsitu. Bila diezaiogun helduleku bat hori guztia bizitzea tokatu zaigunoi.
Beste hainbat gauza ere egiten ditugu, eta horien berri gure webgunean eta facebooken ematen dugu, baina gure helburu nagusia helduleku horien bilaketari ekiteko espazioak sortzea da.
Egoera horretan bagaude, gertukoren bat galdu badugu, bere buruaz beste eginda, nola jarri zuekin harremanetan?
Guk ez dugu harremanetarako telefonorik jartzen pertsonal espezializaturik ez daukagulako.
2019ko ekainaren 3an Euskadin suizidioa prebenitzeko estrategia argitara eman zuen Eusko Jaurlaritzak.
Halako ardura eskatzen duen telefono bat Jaurlaritzaren prebentzio-estrategia horren baitan egon behar duela uste izan dugu hasieratik. Gure ustez halako egoera lazgarrian gelditu diren hainbat pertsonen erantzukizuna ezin daiteke irabazirik gabeko elkarteen eskutan utzi.
Erakundeekin harremanetan jarri ginen, baina ez genuen erantzun egokirik jaso. Gaur egun esan dezakegu prebentzio plan horretan agertzen den telefonoak ez duela behar bezala funtzionatzen.
Nik kasu erreal batekin deitu nuen. Izan ere, lagun batek deitu zidan bere ezagun bat suizidio saiakerekin zegoela esanez, zer egin ez zekiela. Telefono horretara deitu genuen, eta ez zuten jakin nora jo behar genuen esaten. Gehiago, biziraun elkarteaz galdetu nien eta ez zekiten existitzen zenik ere.
Anbulatorioko lehen-arreta zerbitzura deitzeko esan ziguten, ea han zerbait esaten ziguten...
Guk badakigu zein gogorra den halako egoera larri batean dagoen pertsona bati lehen-arreta zerbitzura joan dadila esatea. Auskalo zer esaten dizuten han, segun nor tokatzen zaizun parean... Uf!!! oso gogorra. Eman zigutena ez da inondik inora erantzun egokia. Horregatik guk ez dugu telefonorik jartzen, agian egunen batean izan beharko dugu.
Behar izanez gero, guk Madrileko La barandilla elkarteko telefonoa ematen dugu. Egunero, astelehenetik igandera, goizeko bederatzietatik gaueko bederatzietara funtzionatzen duen telefono bat dute eta atzean pertsona aditu bat dago. Hau ere irabazi asmorik gabeko elkartea da, ez du diru publikorik jasotzen... Nik horra behin baino gehiagotan deitu dut, eta funtzionatzen duela esan dezaket.
“Maite dugun norbaiten suizidioak mindutako pertsonen elkartea”. Supervivienteen elkartea beraz, biziraun. Minarekin bizitzen, ikasi egiten da? Zerk laguntzen du?
Galdera ona. Norbanakoak aurkitu behar du bere bidea. Egia da protokolo guztietan bide bakarra balego modura hitz egiten dela, eta hala da, baina bide hori norberak egin behar du. Honekin zera esan nahi dut: momentu batean pertsona bati ondo etorri zaiona beste batengan desastre hutsa izan daiteke; eta justu kontrakoa ere bai: pertsona batengan funtzionatu ez duenak beste batentzat ona izan daiteke. Bakoitzak bere bidea egin behar du.
Horrelako egoera batetik atera daitekeen? Ez dakit. Baina bai, ikasi daiteke, baina oso gogorra da. Oso.
Norbaitek Everestera igo behar dugula esango baligu ezinezkoa dela erantzungo genioke. Baina posible da. Motxila soinean jarri eta entrenatu, entrenatu eta entrenatu. Gogorra da. Nik horrela irudikatzen dut supervivienteon egoera.
Inoiz gerta ezin zitekeela pentsatzen genuena gertatu egin da, eta oinarrizko-oinarrizkoa den zerbait kendu digu. Burutik pasa ere ez zaizu egiten, baina gerta liteke.
Edonori gerta dakioke?
Noski. Ez dezagula pentsa suizidiorako prototipo konkretu bat dagoenik, eta inguruan horrelako inor ez dugunez edo eta horrelakoak ez garenez guri ez zaigula gertatuko. Ez. Edonori gerta dakioke. Kontuz honekin!
Izan ere datuak ikaragarriak dira. Estatuan egunean 10 pertsonek egiten du bere buruaz beste, Euskadin bi egunetik behin suizidioaz hildako bat...
Horiek dira ofizialki jasotako datuak, ofizialki ustez suizidio bidez hil diren pertsona kopurua. Baina bada oso deigarria den beste datu bat: 2000. urtean istripuz erorita hildakoak eta itota hildakoak 2600 pertsona izan ziren, 2018an 6200. Gorakada oso adierazgarria. Zeinek daki zenbat suizidio ote daden hildako horien artean... Gorakada ikaragarria da.
Arazo baten aurrean baldin bagaude, nahiago dut zertaz ari garen jakitea bere gordintasun osoarekin. Ikuspegi errealista horretatik abiatuta jakingo dut zer egin daitekeen eskura ditugun baliabideekin.
Baina oraindik badago mamurik, hitz egin nahi eza... Gai delikatua da.
Zergatik suizidioari buruz hitz egiteko traba horiek?
Beldurra diogu heriotzari orokorrean, bizkarra eman diogu. Orain dela gutxi arte gure zaharrak etxean hiltzen diren. Heriotza bizitzarekin lotzen zen beste atal baten modura ikusten zen. Orain heriotza industrializatu egin dugu, teknifikatu eta gure hildakoak tanatorioetara eramaten ditugu, hildakoak ikustea mingarria izanagatik begi bistan eduki ez ditzagun.
Gure kasuan, Joseba joan zitzaigunean, nire emaztea besarkatzen lehenak etorkin lagun batzuk izan ziren. Zergatik? Etorkinak heriotza oraindik ere gertutik bizi dutelako. Gure gizarte aurreratuan aldiz, heriotzari begiratu ere ez diogu egiten. Beldurra diogu, eta suizidioari zer esanik ez. Beldur horrekin suizidioari buruzko aurreiritzi gehiegi eta mito asko estaltzen ditugu.
Krisi-egoera batean dagoen pertsonari beste aukerak badituela ez badiogu esaten, gizarte honetan lekurik ez duela eta ez dela onartua esaten ari gatzaizkio; egin dezakeen gauzarik hoberena... Tristea da.
2019an kotxe-istripuz hildako bakoitzeko, bere buruaz beste egin duten 2, genero indarkeriaz hildako bakoitzeko, suizidio bidez hil diren 75. Baina apenas dirurik eta baliabiderik ez da eskaintzen suizidioa prebenitzeko.
Datu bakarra emango dizut. Begira, puntu bidezko karnetaren sistema 2006ko uztailaren 1ean jarri zen indarrean, eta urte erdian estatistikek esaten dute kotxe-istripuz 1000 hildako gutxiago izan zirela. Beraz, suizidioa prebenitu ote daitekeen galdetzen denean erantzuna argia da. Guztiz ez, baina ahalegindu gaitezen. Eman diezaiogun aukera jendeari horrelako krisi-egoera batean laguntza eske nonbaitera joateko. Gaur egun ez dakigu nora joan.
Ni neu nahikoa kritikoa naiz Euskadi mailan egin denarekin. 2020rako jardunaldi batzuk antolatu ditugu, EHUko Udako Ikastaroen baitan, eta suizidioa prebenitzeko euskal planaren koordinatzailea gonbidatu dugu. Uda ikastaroko saio honetan estrategia hau martxan jarri zenetik urte bat igaroa izango denez, osasun sailaren balorazioa gertutik ezagutzeko aukera izango dugu. Primerako aukera beraz, estrategia landu dutenekin aurrez aurreko balorazio bat egiteko.
Jendeak zuengana jotzen du. Nola gerturatu suizidio bidez hurbileko bat hil zaion norbaiti?
Zer egin? Nola hurbildu? Lehendabizi errespetu handiarekin aholkurik ez eman. Ez dakigu bestea zein egoeratan dagoen, suizidio bidez hil zaion hori berreskuratzea ezinezkoa baita. Isilik egoteko prest egon behar dugu, entzuteko. Aukera eman besteari hitz egiteko. Zer moduz dagoen galdetzea askotan nahikoa da. Bestea hitz egiten has daiteke, edo negar egiten. Guzti horri aurre egiteko prest egon behar dugu.
Eta mesedez horrela sufritzen ari den pertsona batengana hurbiltzen bagara, gero ez joan ihesi. Hori gertatzen bada betirako joan zara, nahiz eta aurretik lagunik onena izan. Holako egoera bat pasa ondoren norbera emozionalki oso erradikala bihur daiteke, ez dago erdigunerik: niregana hurbildu nahi ez baduzu, fuera! Betirako.
Suizidio bidez hil diren pertsonen izenak ez dira aipatu ere egiten, beldurra ematen du! Baina supervivienteok gure hildakoei buruz hitz egiteko beharra dugu! Nahiz eta izena aipatzea mingarria izan.
Era horretan joan behar dugu: geure burua eskaini, isilik eta entzun. Ematen du gutxi dela, baina ikaragarria da: horrelako egoerei eusteko gaitasun aparta behar da.
Epeek ez dute balio. Galdutakoa inork ez digu berreskuratuko, eta bizitzen ikasten da, beste era batera: balioen eskala goitik behera aldatzen da, baita lagunak ere...
Egoera latz guztietatik ikasten dela diote. Hurbileko bat, seme bat, suizidio bidez hiltzen zaizunean ere bai?
Horrelakoak maiz entzuten dira, baina nik ez diot inori opa horrelakorik, ez eta nire arerio handienari ere. Horrelako egoeretatik ere ikasten da, egia da, baina beste erremediorik ez daukagulako. Hori egin ezean, heriotza dago.
Suizidio bidez hildakoengandik hurbil dauden horiek, estatistiken arabera, bere buruaz beste egiteko probabilitate handiak dituzte, bizitzari inongo logikarik aurkitzen ez diotelako. Baina ikasi egiten da, beste aukerarik ez dagoelako. Ikasketa-prozesu luze eta gogor horrek osasunarekin zerikusia duten arazo fisiko asko dakartza. Hori ere frogatuta dago.
Ikasi, ikasi egiten da, agian beste erremediorik ez dagoelako, zentzurik ez daukan egoera bati logika aurkitzea.
Logika kontua da?
Gure kasuan guztiz antinaturala izan da, hain gaztea joateak ez dauka bizitzaren logikarekin zerikusirik. Zerbaitetarako balio izan badu... Kontua ez da zergatik, zertarako baizik. Nietzscheren esaldi bat ekarriz, " "Bizitzeko motibo bat duenak, edozer jasan dezake". Gure kasuan, zertarako? Guk ulertu nahi izan dugu Joseba joan izanak bide hori hartzera behartu gaituela eta bide batez, baita ere, beste batzuei laguntzeko edo... Hori da hartu nahi izan dugun logika, jakinda oso gogorra dela.
Posible da zergatik bat identifikatzea?
Ez. Suizidioaren zergatiak jakingo bagenitu, soluzioa oso erraza litzateke. Baina ez da horrela. Suizidatzeko ez dago arrazoi bakarra; ez da adin kontua; ez dago profil konkretu bat; Malagan suizidio-tasa oso handia izanik, adibidez, eguzki-orduek ez dute zerikusirik... Kontua da ez dagoela faktore bakar bat suizidiorako. Faktore asko daude, eta nahiz eta momentu puntual batean eragina izan, ez dira erabakigarriak, beti atzean beste zerbait dagoelako.
Suizidioari buruz normaltasunez hitz egiteak zergatik lagun dezake?
Arrazoia oso sinplea da. Suizidatzen denak askotan ez daki zer nolako sarraskia sortzen duen bere inguruan. Horretaz ere hitz egin dezagun guztiok jakitun izan gaitezen. Bizitza oso konplexua da eta maila askotako arazoak dakartza. Beti dago alternatibaren bat. Suizidioak ez du soluziorik ematen, eta ematen badu, oso kaxkarra da eta ez du atzerabiderik. Bizitzak arazo asko ditu, larriak ez dira hain beste. Suizidioa oso arazo larria da, soluziorik gabekoa. Horren jakitun izan behar gara.
Suizidioari buruz hitz egin behar da, etxean, hezkuntza sisteman, lagunen artean... Suizidioa gertatzen denean, akabo, ja ez du itzulbiderik, horregatik hitz egin behar da horri buruz.
Horren ondoan gelditzen garenok betirako gelditzen gara puskatuta. Puskatuta betirako, bataz beste, suizidio bakoitzeko, sei pertsona gelditzen dira. Suizidio bakoitzeko 20 saiakera daudela esaten da. Euskal Autonomia Erkidegoan 10 suizidio-saiakera egunero.
Suizidioari buruz ez hitz egiteak ez du ezer ere konpontzen. Gerta litekeen zerbait da, edonori gainera. Egin dezagun zerbait.
Iluntasun edo krisian erori den horri galdetu zer moduz dagoen, adibidez?
Egoera horretan dagoenari ateak ireki eta galdetu: Aizu, arazoekin zaude? Laguntza nahi duzu? Zer gertatzen zaizu? Horrekin bakarrik bizitza bat salba daiteke.
Suizidatzeko erabakia hartuta zuen zenbait jende gure hitzaldietara etorri eta hitzaldi horietan entzundakoa entzun ondoren, hizlariari honakoa esan: eskerrak entzun zaitudan, nire buruaz beste egitera nindoan.
Datuak oso gordinak eta gogorrak dira. Zerbait egiten al da gizarte-mailan?
Ni oso kritikoa naiz. Erakundeek beste eremutan prebentzio-kanpainak eta kontzientziazio-egunak antolatzen dituzte, baina suizidioaren eremuan, ez da ezer egiten. Nazioarte maila oso esanguratsuak diren bi egun daude: irailaren 10a, suizidioaren prebentziorako nazioarteko eguna; eta azaroaren hirugarren larunbata, supervivienteon eguna. Bi data horietan ez da ezer egiten erakundeen aldetik.
Erakundeak pattal dabiltza suizidioarekiko duten jarreran. Zer nolako esperientzia izan duzu Elizak duen jarrerarekin?
Gurea gertatu zenean, martxoan zazpi urte, Markinako apaizak esan zigun ez zekiela zer esan. Hori oso gogorra da, ze era normal batean hil denak mota guztietako laudorioak jasotzen ditu. Suizidio bidez hil den 17 urteko mutiko bati ezer ez. Hileta elizkizunean ere bere lagunetako bati bakarrik utzi zion hitz egiten, eta askok hitz egin nahi zuten... Oso gogorra.
Harrezkero ez naiz berriro Markinako elizan sartu.
Baina beste aldetik, Josebak etxe ondoan zegoen ikastetxe erlijioso batean ikasten zuen. Hil zenean ikastetxe horretako monjek sagarrondo bat jarri zuten bere izenean. Joseba urte hauetan beti presente izan dute, ez dute sekula ezkutatu. Sagarrondo haren lehendabiziko sagarrak guri ekarri zizkiguten. Oso ederra.
Askotan joaten gara Ziortzako monasteriora. Asko gustatzen zaigu. Ziortzako elizkizunetan hildakoak aipatzen direnean lehendabizi aipatzen diren bi pertsonak suizidatutakoak dira: Arkaitz eta Joseba. Beti aipatzen dituzte, gu joan edo ez. Ez dute aurreiritzirik. Pertsona bezala tratatzen dituzte. Oso eskertzekoa da hori. Josebaren izena entzuteko bakarrik inoiz Zarauztik haraino joan izan gara.
Elizak ere gai honetan bere trantsizioa egin behar du, eta gauzak aldatzen doaz. Azaroaren hirugarren larunbata, supervivienteon eguna. 2018an Donostian egin genuen ekitalditxo bat, alde zaharreko eliza batean. Bertako apaizak ez zigun inolako oztoporik jarri bere elizan ekitaldi zibila egiteko. Hirurogeita hamar bat pertsona batu ginen bertan, tartean moja batzuk zeuden. "Bai gure artean orain dela gutxi gertatu zaigu", esan zidaten.
Jainkoak izan al du eraginik, superviviente zaren aldetik, berreraikitze lan honetan?
Gauza askorik ez egia esan. Norberak bere bidea egiten du, eta nik introspekzioari heldu diot, neure burua eta nire mugak hobeto ezagutzeari. Gauzak zerbaiterako gertatzen dira. Hor aurkitu diot zentzua bizitzari. Beste norbaitek beste bideren bat topatuko zuen, eta agian hor Jainkoa egongo da, baina nik nire ibilbidea kontatzen dut.
Transzendentziarik badagoen edo ez? Agian bai. Itxaropen hori dut: noizbait nire Joseba besarkatu ahal izango dudala. Gertatuko den edo ez, ez dakit, baina horri heltzen diot.
Bukatzeko, zer esan nahi du Arantzazuk zuretzat?
Begira, Josebarena gertatu zenean Arantzazura joan ginen, bake bila. Ez ginen iritsi ordea, elurtuta zegoen eta.
Arantzazun ni neu bakean aurkitzen naiz. Isiltasuna. Hango parajeak... zoragarria da. Oso eroso sentitzen naiz Arantzazun.
Niri elkarrizketak mezu positiboarekin bukatzea gustatzen zait, horregatik jendeari suizidioak beti irtenbidea duela esango nioke. Suizidioa behin-behineko arazoei ematen zaien behin-betiko konponbidea dela diote. Hitz egin dezagun arazo horietaz. Bestetik zoritxarrez suizidioa gertatuz gero, ondoren gelditzen direnei mezu positiboa bat: posible da bizitzari aurre egitea. Hori bai, bakoitzak bere bidea egin behar du. Bide luzea, gogorra eta amaigabea.
Eskerrik asko!